Montenegro de Norte a Sur: Kotor y Bar

Este post viene a ser una continuación de mi ruta de siete días y post por Montenegro de Norte a Sur. Parte I

En esta segunda parte, me gustaría contaros un poco más acerca de estos dos sitios, Kotor y Bar, dos de las principales ciudades turísticas de este pequeño país de los balcanes, bañado por el Mar Adriático.

Montenegro es un país relativamente pequeño y con una población que apenas llega al medio millón de habitantes, de punta a punta del país hay apenas 120 km, el problema son las carreteras, tardarás a buen ritmo tres horas para ello.

Al tener nuestro "campamento base" en Budva, justo en el medio de la costa de Montenegro, nos permitía movernos a cualquier sitio sin tener que salvar grandes distancias; uno de esos días, pusimos rumbo a la antigua ciudada amurallada de Kotor.

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1a parada: Kotor

Fundado por los romanos, colonizada por Dalmacia y finalmente bajo la protección de la República Veneciana, este enclave tiene la esencia característica de la costa Adriática así como la arquitectura Ítalo-Veneciana que se aprecia en cualquier pueblo de la costa Italiana.

El centro histórico de la ciudad, se encuentra protegido por una enorme muralla veneciana y rodeada por canales, sólo accesible por tres enclaves específicos.

Siempre foto-pasaporte y café..

Decidimos iniciar nuestra visita de Norte a

Sur, como el post, eso sí, desayunando antes en una cafetería muy agradable con una terraza medio suspendida encima del canal y con unas vistas increïbles, allí comimos unos pancakes y tomamos un café, ese día habíamos pegado el madrugón y se respiraba algo de sueño en el ambiente, el sitio se llama Cukar Pancake

Empezamos a perdernos por dentro del recinto amurallado de Kotor, la verdad es que no hay nada mejor que eso; dentro del centro se esconden calles estrechas con edificios de estilo veneciano, patios con palmeras, pequeñas capillas así como tiendas artesanales con productos de proximidad, recomendación comprar Rakia si os gusta el anís, lo hacen muy bueno allí.

Algo que también es muy tradicional de la región es el burek de carne y el de queso feta, debéis probarlo en cualquier panadería, es un MUST.

Después de callejear un poco, encontramos unas escaleras que parecían subir a la cima de la muralla, y efectivamente así fue, sin querer habíamos encontrado el modo de llegar al sitio con mejores vistas de toda la bahía de Kotor!

Ps: Debo decir que Kotor alberga el Castilllo de San Giovanni, desde el cuál se puede ver la bahía entera y realmente, dejarte sin palabras! (aprox. 45-60min andando cuesta arriba).

Si creéis que es demasiado, veréis que cada vez que subís la montaña las vistas mejoran, vosotros decidís cuando parar de subir.

Algunas fotos que hice dentro del recinto amurallado de Kotor.

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2a parada: Bar

Esta ciudad, fue nuestro último destino a lo largo de nuestra ruta en coche por Montenegro, ya que íbamos a poner rumbo a Ohrid, Macedonia del Norte, conduciendo casi cuatro horas para cruzar todo Albania, (país que hasta la fecha me ha disgustado más).

Ese día, salímos de nuestro apartamento en Budva, hicimos el check-out y pusimos rumbo al paso fronterizo de Muriqan, parando antes en esta pequeña ciudad llamada Bar.

Una de las curiosidades de esta ciudad, es que está aproximadamente delante la ciudad de Bari, motivo por el cuál hay tanta similitud entre sus nombres, es más, el inventor italiano Guglielmo Marconi, probó su primera transmisión de radio entre ambas ciudades a banda y banda del Mar Adriático.

Bar, es una de las ciudades más importantes de la región por su puerto de mercancías, de cruceros y alberga también los diferentes buques de la marina montenegrí.

Esa esencia de ciudad pesquera se vive y se nota nada más andar por su paseo marítimo hasta llegar al Palacio del Rey Nicola, dónde el paseo se ensancha y la playa empieza a cobrar vida, toda llena de bares a pie de playa, con música chill out dónde pudimos tomar algo y finalmente un café antes de la puesta del sol, algo increíble.

Por si no lo había indicado, visité Montenegro en Febrero, el clima no inspiraba bañarse ni quitarse la bufanda!

La ciudad en sí, no destaca por ser un atractivo turístico pero la verdad es que sus iglesias de cúpula dorada son algo diferentes a lo que había visto hasta ahora, y mira que he recorrido toda la región de los Balcanes, me gustó mucho una en concreto.

Luego, siguiendo con las iglesias, visitamos una que era de nueva construcción, probablemente la más rara que haya visto en mi vida junto con la de Reijkiavik, Islandia.

Y con esto, porque honestamente no hay mucho más que visitar en Bar, decidimos poner rumbo a nuestra próxima ciudad, Ohrid, Macedonia del Norte, a casi cinco horas en coche y con tres fronteras que cruzar....